sábado, 22 de diciembre de 2012

Galletas de tarta de queso



Si estáis leyendo hoy esta entrada es que ha pasado en vuestra vida una cosa buena y otra mala. La buena, que los mayas no tenían razón y que aquí seguimos, con el mundo girando como si tal cosa. Y la mala, que no os ha tocado la lotería, aunque, pensándolo bien, tampoco es tan mala, porque eso significa que salud no os va a faltar así que.. ¡enhorabuena!

Con esta receta os deseo a todos/as que paséis unos felices días de Navidad con la familia y los amigos, que disfrutéis de las comidas, cenas, reuniones y demás y que entréis con muy buen pie en 2013 (¡uf!, cómo suena, 2013….).

Estas galletas de tarta de queso me hipnotizaron desde la primera vez que las vi en el blog de Sandeea, La Receta de la Felicidad. Primero, porque entran por los ojos y segundo, y muy importante, por su sencillez. Un pequeño postre navideño al que nadie se podrá resistir, os lo aseguro.

Si queréis ver la receta original de Sandeea, pinchad aquí.

Y esta es la mía:

INGREDIENTES

Tartaletas de galleta (24)
100 gramos de nata de montar con 35% de materia grasa
200 gramos de queso de untar
100 mililitros de leche condensada
Zumo de medio limón
Mermelada de mora
Colorante rojo y verde

PREPARACIÓN

En un bol se mezcla bien la nata, el queso de untar, la leche condensada y el zumo de limón.
Separar dos cucharadas de la mezcla en dos boles diferentes y teñir con el colorante rojo uno y con el verde otro.
Para rellenar las tartaletas, primero se cubre la base con una capa de mermelada. Encima, se echa la mezcla de queso, nata, leche condensada y limón, dejando la superficie lisa.
Ahora es el turno de la decoración. Para hacer el acebo, se unta un palillo en el colorante rojo y se introduce en la mezcla para conseguir hacer las tres bolitas. Para las hojas de acebo, con otro palillo se traza una línea gruesa verde y se rallan ambos lados.
Meter las galletas en el frigorífico durante al menos cuatro horas y ya estarán listas para servir.


OBSERVACIONES PARA PRINCIPIANTES COMO YO

Como dice Sandeea, muy importante, los ingredientes que se utilicen tienen que ser grasos, nada light, para que la mezcla cuaje mejor.

Las tartaletas también se pueden hacer caseras, pero ahora en Navidad es muy fácil encontrarlas en cualquier supermercado (yo las compré en Mercadona) y no complicarse tanto con la receta.

La mermelada, por supuesto, podéis poner la que más os guste: mora, fresa, frutas del bosque… 

 


Lo dicho, ¡feliz Navidad!  y nos vemos ya el próximo año. Sed buenos para que los Reyes Magos os dejen todo lo que habéis pedido, ¿eh? y disfrutad de estos días.
 


lunes, 17 de diciembre de 2012

Magdalenas de Xavier Barriga







Y un día me levanté con antojo de hacer magdalenas. Gran parte de la culpa la tuvo este artículo que vi en Directo al Paladar, que recomiendo muy mucho leer para hacerse con todos los trucos a la hora de hacer una magdalenas ricas, ricas.  

Y, claro, como Pam, de Uno de dos, era la autora del artículo, pues me fui a por su blog (impresionante, ya lo sabéis) para buscar una receta. Hacía mucho tiempo que llevaba con ganas de hacer algo de Xavier Barriga así que me decanté por sus magdalenas, aunque, con los cambios de Pam, así que quizá tendría que rebautizar las magdalenas con su nombre, ¿no? Sea como sea, están muy, muy ricas. 

 Si queréis ver la receta original de Pam, pinchad aquí. 

Y esta es la mía: 

INGREDIENTES 

4 huevos 
265 gramos de azúcar 
2 cucharaditas de miel 
90 mililitros de leche 
285 mililitros de aceite de girasol 
315 gramos de harina de repostería 
Medio sobre de levadura química 
Polvo de naranja (receta aquí
Una pizca de sal 

PREPARACIÓN 

En un bol, batir los huevos con el azúcar hasta que se integre todo bien. Añadir la leche mientras se sigue batiendo, luego el aceite y finalmente el polvo de naranja. 
Cuando esté todo bien integrado, ir echando la harina con la levadura química, tamizada, para evitar grumos, y mezclar con una espátula. 
Dejar reposar la masa en la nevera al menos una hora. 
Cuando se vayan a preparar las magdalenas, precalentar primero el horno a 250ºC. 
Verter la mezcla en los moldes, llenando solo tres cuartos, y meter en el horno, durante aproximadamente un cuarto de hora, a una temperatura de 175ºC. 
Dejar reposar unos cinco minutos las magdalenas en los moldes antes de sacarlas y que se enfríen sobre una rejilla. 

OBSERVACIONES PARA PRINCIPIANTES COMO YO 

 Lo más socorrido, leer el artículo del que os he hablado al comienzo de la entrada, allí están todas las claves. 

En mi corta experiencia, lo que siempre me ha funcionado para que las magdalenas suban a lo alto y no se expandan a lo ancho (aunque luego están igual de ricas, la estética a veces cuenta también un poco) es meter los papeles en pequeñas flaneras, al ser moldes rígidos, la masa solo puede subir. 

La receta original de Pam dice que se hornee a 210ºC. Eso hice yo en la primera tanda y se me quemaron, así que bajé un poco para la segunda. Lo mejor es aprender a controlar el horno de cada uno y saber qué temperatura es la que más conviene. Ya sabéis: prueba-error hasta dar en el clavo. 

Para darle un toque aún más rico, probad a espolvorear azúcar en la masa antes de meterla en el horno




.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Calendarios (culinarios) de Adviento

Lo digo siempre que se acercan estas fechas: no me gusta la Navidad, no han empezado y ya estoy deseando que terminen. ¿A qué se debe esta fobia? Pues cualquiera que eche a alguien mucho, mucho de menos, lo entenderá. Eso es lo que me pasa a mí, mis navidades dejaron de ser felices con 15 años.


Pero no quería hablar de eso, quería confesaros que, en estos últimos años, desde que tengo el blog de cocina, me hacéis replantearme un poco mi tirria a las navidades. Y todo gracias a las magníficas propuestas que os curráis cada diciembre, como esos fabulosos calendarios de Adviento. Me encanta leer vuestra pasión por estas fechas tan familiares y vuestras propuestas culinarias, tan apetecibles.

Y quería dar un poco de publicidad a las que estoy siguiendo este año, por si os las estáis perdiendo. Estáis a tiempo de disfrutar de esa sorpresa diaria.




Empezamos por Akane, con su blog Albahaca y Canela. Este año ha decidido ofrecer cada día un aspecto de la Navidad, para prepararnos para lo que llega: desde el árbol, hasta los regalos, pasando por la familia, los dulces, las tarjetas de Navidad…(esta foto es de una de las que hizo de niña).




Este año parecía que Noema, de Intercultura yCocina, nos iba a dejar con las ganas de su maravilloso juego de Adviento. Y es que nos tenía muy mal acostumbrados. Pero, atendiendo a la petición popular, nos deja un cachito de Navidad cada domingo. 



Y además, para recordar todo lo que hemos aprendido en los años anteriores, ha hecho una recopilación de recetas navideñas que no tiene desperdicio.

 




Para finalizar, Wholekitchen, donde me acerco también cada día para ver qué esconde cada uno de los días de su calendario. Todo buenas ideas gracias a un buen trabajo en equipo.

Así que ahí os dejo deberes para poneros al día de los calendarios de Adviento y encontrar buenas ideas para las próximas fiestas.

Y si sabéis de alguno más que me estoy perdiendo…¡soy todo oídos!




lunes, 10 de diciembre de 2012

Tartiflette


Amor a primera vista. Esto es lo que sentí al ver la receta en el blog de Cocotte, del que os he hablado en una entrada anterior y al que os animo a visitar, porque cada semana se supera un poquito más… y con recetas bien sencillas. A mí me tiene enganchada cada domingo, la verdad.
El plato, tartiflette, es de origen francés, por lo visto, y de ligero no tiene nada…¡por eso está tan rico! Lo hice el otro día para la cena con unos amigos y en la fuente no quedó ni un poquito, así que es un éxito asegurado.

Si queréis ver la receta original de Cocotte, pinchad aquí.

Y esta es la mía:

INGREDIENTES (para 4 personas)
5 patatas
1 paquete de bacon ahumado
Media cebolla
1 bote pequeño de nata líquida (200 mililitros)
1 cuña de queso brie
Sal
Pimienta

PREPARACIÓN
Para comenzar, se pelan las patatas, se lavan bien y se parten muy finitas, como si fuera para hacer tortilla. Salpimentar.
Freírlas en aceite bien caliente y reservar en un plato con un poco de papel absorbente para que escurra un poco el aceite.
Partir la media cebolla en trocitos pequeños y pochar en la sartén hasta que quede blandita. Haced lo mismo con el bacon y reservar.
Para preparar el queso brie, quitarle la capa blanca y cortar en lonchas más o menos finas.
Ahora que están todo los ingredientes, vamos con la preparación del plato. En la fuente que vayáis a meter en el horno, pincelad el fondo con un poco de aceite o mantequilla para que no se pegue. Para montar el plato hay que poner los ingredientes en capas: primero las patatas, luego la cebolla, el bacon, la nata y finalmente el queso brie. 




Repetir el proceso y terminar con una capa de patatas fritas.
De forma opcional, se puede rallar un poco de queso por encima antes de meter en el horno.
 



 

Estará hecho en unos 15-20 minutos, para que el queso se funda bien… ¡y listo para servir!


OBSERVACIONES PARA PRINCIPIANTES COMO YO

Lo he comentado en mis primeras recetas, pero os lo recuerdo aquí. Si no sois muy hábiles con el cuchillo (como es mi caso) la mejor manera de cortar la cebolla en trocitos pequeños sin ver cómo peligran tus dedos es meterla en la picadora. Ella hace todo el trabajo sucio.

Como sugiere Cocotte, es mejor “pelar” el queso brie y cortarlo recién sacado de la nevera, para que no se desmenuce mucho, porque es muy tierno.

Acordaos de dividir los ingredientes de la siguiente manera para tener suficiente para cada capa: las patatas fritas en tres y el queso, bacon y cebolla en dos.

En la receta original también le añaden un chorro de vino blanco tras cada aportación de nata, por si os apetece.
 


martes, 4 de diciembre de 2012

Red velvet brownie



Venga, vamos con una receta dulce, que sé que lo estabais echando de menos (también algunos sé que no tanto…). Los que me conocen saben que me pirra el bizcocho red velvet, que he repetido hasta la saciedad, cada vez que tengo la excusa de alguna celebración. Es que está tan rico….¿Qué? ¿Qué todavía algunos/as no lo habéis probado? Pues aquí os recuerdo la receta que colgué hace tiempo, es verla y hummmm

El caso, tuve que organizar un cumpleaños en noviembre, imaginaos, 18 personas en casa, yo encima curraba el fin de semana, pero al final salimos del paso, ¡uf! El viernes, que descansaba, me dediqué a dejar hechos los postres y me acordé de mi adorada red velvet, pero quería una versión distinta, de esas de poder comer con la mano, más que nada porque mis invitados no iban a estar sentados, sino pululando por el salón, picando algo, charlando…así que me acordé de esta receta de mi tocaya Bea, y decidí adaptarla porque entre los amigos había alguno que odia el queso (luego me di cuenta, tarde, de que también había otro que no puede con el chocolate pero bueno…¡es imposible organizar un menú de fiesta sin queso ni chocolate, eso me quedó claro!).

Así que hice este red velvet brownie, que parece que gustó, porque lo que sobró se lo sortearon para llevárselo a casa, ¡ja.ja!

Si queréis ver la receta original de Bea (que la tengo pendiente), pinchad aquí.

Y esta es la mía:

INGREDIENTES

85 gramos de mantequilla sin sal
120 gramos de chocolate con leche
150 gramos de azúcar
2 huevos
75 gramos de harina
Colorante rojo
1 cucharada de cacao en polvo
Un pizca de sal
Cobertura de vainilla

PREPARACIÓN

Tamizar la harina con la sal y el cacao y reservar. En un bol apto para microondas, fundir la mantequilla y el chocolate y mezclar para que se integren.
Añadir a esta mezcla el azúcar y batir todo bien, después, echar los huevos, de uno en uno, y seguir batiendo.
Por último, incorporar la mezcla de harina tamizada.





Ahora es la hora del colorante, al gusto, hasta que tengáis el color que queráis.
 


 



Verter la mezcla en un molde y meter al horno durante 30 minutos a 175ºC. Estará listo cuando al pinchar con un palillo, este salga limpio.
Cuando esté frío, verter por encima la cobertura y decorar al gusto.
Servir en porciones individuales… ¡y dejad que repitan si les ha gustado!
 




OBSERVACIONES PARA PRINCIPIANTES COMO YO


La cobertura la compré en el Lild, en una oferta que había en esos días y que no sé si será un producto que lo tengan durante más tiempo. La verdad es que era muy sencillo de utilizar porque bastaba con calentarlo en el microondas y ¡listo para decorar! Eso sí, inmediatamente de cubrir el pastel, hay que echar el resto de los adornos de azúcar para que se peguen al chocolate y no se suelten. De todas maneras, supongo que esta cobertura se puede hacer bien fundiendo un poco de chocolate con un chorro de leche.
Ya sé que estamos en época de crisis (¿cómo olvidarlo, si no paran de recordárnoslo cada día?) pero si tenéis ocasión, utilizad chocolate de calidad para hacer el postre, ¡la diferencia es abismal, os lo aseguro!