El brownie es quizá, para mí, el postre perfecto, tanto para el que cocina como para el que lo disfruta. Creo que pocos dulces hay más sencillos de hacer y que triunfen tanto. Además, tiene ingredientes fáciles, quiero decir, de esos que siempre sueles tener por casa, se puede hacer con un día de antelación (y gana en sabor), es rápido de preparar y servido templado con una bola de helado ya es la pera limonera.
Mi versión de toda la vida es una de mis primeras recetas en
el blog, allá por 2009. Creo que es el postre que más veces he hecho en mi vida.
Y siempre triunfa, os lo aseguro. Cuando vi la receta de este brownie especial,
en Con las zarpas en la masa, supe que tenía que hacerlo. El resultado es
espectacular, un postre superjugoso y con un sabor intensísimo a chocolate. Eso
sí, si hay que ponerle un “pero” es que trabajar con remolacha cocida es
escandalosamente sucio, parece que eres el protagonista de “La matanza de
Texas”, con salpicaduras rojas por toda la cocina (por lo menos en mi caso).
Si queréis ver la receta original de Paula, pinchad aquí.
Y esta es la mía:
INGREDIENTES
300 gramos de remolacha cocida (dos piezas, aproximadamente)
200 gramos de mantequilla
250 gramos de chocolate para fundir (el de hacer postres)
3 huevos
200 gramos de azúcar moreno
60 gramos de harina normal
30 gramos de cacao en polvo
Media cucharadita de levadura química
PREPARACIÓN
Lo primero de todo es triturar la remolacha cocida, con la
batidora, hasta que quede una masa. Pasadla a un colador para que vaya soltando
el líquido mientras seguís preparando los demás ingredientes.
Se derrite el chocolate con la mantequilla en un bol. Yo
suelo meterlo un par de minutos en el microondas si acabo de sacar la
mantequilla del frigorífico, lo saco y voy dando vueltas con una cuchara,
porque del calor que ya tiene terminan de derretirse los dos ingredientes y así
no se queman por exceso de calor.
En otro bol se echan los huevos con el azúcar y se baten.
Cuando esté integrado, se añade el chocolate y mantequilla derretidos y por
último se agrega la remolacha, ya escurrida del todo.
Se integra bien y se echan los ingredientes sólidos (harina,
cacao y levadura) que se mezclan al resto con la ayuda de una espátula.
En un molde se echa toda la mezcla y se hornea a 180ºC con
aire durante unos 25 minutos.
OBSERVACIONES PARA PRINCIPIANTES COMO YO
Sobre todo, que no os eche para atrás el ingrediente
estrella, la remolacha, aunque no os guste nada. Os doy mi palabra de que no le
da nada de sabor, solo jugosidad, os lo aseguro. Es algo parecido a lo que
ocurre con el pastel de zanahoria.
Solo hay que tener un poco de cuidado para deshacer la
mantequilla y el chocolate sin que se quemen. Una manera un poco más larga de
hacer, pero fácil igual, es poner ambos ingredientes en un bol a fuego lento e
ir dando vueltas hasta que se deshagan.
3 comentarios:
a mi también me encantan los brownie, y éste tiene que estar buenísimo, yo hice un bizcocho de remolacha, y no dije hasta que se lo tomaron que estaba hecho con remolacha.
besos,
Jajaja, eso mismo hice yo cuando lleve a una cena este postre, no desvelé el ingrediente secreto hasta que no se lo zamparon, por si acaso... Si te pirran los brownies, no dejes de probar este, ya verás qué rico!
OMG! Brownie!! Y además con un toque original de remolacha!! Esto va a ser mi perdición!!
Me encanta el que esta receta tenga ingredientes que todas tenemos en casa. A veces, compro algo específico para una receta y luego tengo que tirarlo porque no sé como volverlo a utilizar :(
Pero esta receta es perfecta!! Gracias por compartirla con nosotras!!
Besos - Susana
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